domingo, 1 de septiembre de 2013

Dicen que si no te mata, te hace más fuerte.

Septiembre, nueva etapa comienza. Después de demasiados unos días para pensar, aquí estoy de nuevo, frente a esta pantalla con un par de ideas absurdas, recuerdos borrosos y demasiadas ilusiones dando vueltas por mi cabeza.

Creo que este año está haciendo demasiado en nosotros. Nos está haciendo madurar, caer y levantarnos, pensar en nuevos futuros, olvidar pasados que todavía forman parte nuestra, nos está haciendo ver la realidad de demasiadas cosas, de golpe y sin airbag, con miedos o sin ellos. Además está haciéndonos ver como son ciertas personas en realidad, sin disfraces, sin telón, sin personajes, solo nosotros, personas en un mismo entorno, en una misma vida. Puede que todo pase demasiado deprisa, como es mi caso. Parece que hace dos días estábamos dando la bienvenida al año con alguna copa de más e ilusiones sin romper y ya ves ahora, llevamos más de medio año vivido y con solo un sorbo de vacaciones en el vaso. Sinceramente estoy aprendiendo demasiado de ciertas experiencias, ya que todo está ocurriendo demasiado deprisa y sin botón de pause (por desgracia). Un día te encuentras en una misma habitación llena, con amigos y luchando por cerrar un ciclo y al día siguiente te encuentras en el mismo lugar con desconocidos y apenas un par de aquellos amigos que tenías al principio. Sí, todo cambia y por momentos te sientes frustrado, engañado o simplemente tonto. Tonto por confiar en personas que no lo merecían, por ayudar a gente interesada y por perder el tiempo con ellos. Como ya he dicho, este año va a dejar una gran cicatriz en nosotros que no vamos a olvidar fácilmente, porque cuando la miremos va a recordarnos esos momentos y va a hacernos mas fuertes al saber que vamos a poder enfrentarnos a eso y mucho más en el futuro.

Ahora estamos aquí, preguntándonos que nos espera en la calle tras cerrar la puerta de nuestra casa y abrir otra muy distinta unos cuantos pasos más allá. Nos seguimos preguntando cómo estamos después de que hayan pasado semanas sin vernos, pero seguiremos como ahora, sin hacer nada por remediarlo, metidos en nuestro propio mundo. Unos dejaremos que pasen diferentes y nuevas almas por él, mientras que otros cerrarán las ventanas del suyo sin querer saber nada de nadie, siendo unos necios sin corazón que no recordarán que un día les sacaste las castañas del fuego pudiendo haberles dejado que se quemaran en él.
Y la vida continuará así, demostrándonos cosas que quizás no queramos ver todavía. Tendremos que decidir caminos sin ni siquiera tener tiempo para elegir y fracasaremos más de una vez enfadándonos con nosotros mismos buscando a alguien a quién echar las culpas. Pero todo continúa y aunque puede que ahora pensemos que no tenemos la ‘suerte’ suficiente, tarde o temprano llegará un nuevo giro que nos hará encontrarnos con una oportunidad, con una ilusión o con determinada persona especial. Entonces miraremos a la vida con otros ojos, olvidaremos los fracasos y las desilusiones y miraremos a la vida de manera positiva desprendiendo un brillo que nos hará mágicos y poderosos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario